Espacio de Responsabilidad Social con Fines Solidarios
"Si somos muchos, juntamos más"
26/10/17
Desde hace poco más de un año, el edificio del Ministerio de Seguridad cuenta con un Espacio de Responsabilidad Social con Fines Solidarios.
Nacido de la necesidad de una familia de Ensenada, hoy se convirtió en el lugar por el que la Policía de la provincia de Buenos Aires extiende su mano de una manera diferente a la que lo hace todos los días.
A principios de 2016 un compañero de trabajo contactó a Gisella Basso. Sabía que ella era una persona siempre dispuesta a ayudar y que conocía a mucha gente. El pedido fue claro: una familia con muchos hijos necesitaba calzado. Los mensajes de whatsapp posibilitaron la primera hazaña: en dos horas habían llegado 14 pares de zapatillas. Unos días después, las donaciones se multiplicaron y se hizo necesario buscar un lugar para guardar y organizar todo lo que había llegado.
La voluntad hizo que nadie dijera "esto no se va a poder hacer". Las preguntas fueron "por qué no" y "cómo".
En ese entonces eran cinco personas trabajando activamente; hoy llegan a quince aunque, como reconoce Gisella, son miles porque todos los empleados del edificio participan con donaciones, ideas y propuestas.
El Espacio de Responsabilidad Social con Fines Solidarios tiene un gran tablón en el primer patio. Sobre él se dejan las donaciones y allí se encuentra, también, un libro en el que quien así lo desee puede proponer los lugares a los que se destina la ayuda.
Cada vez que una institución solicita un donativo, el Espacio toma contacto con el lugar para escuchar y evaluar las necesidades. Nadie queda afuera: hogares, copas de leche, entidades deportivas, escuelas de todos los niveles, comedores o familias que pasan por un mal momento.
"Es regocijante llegar desde la Institución al lugar en el que nos necesitan. Es una forma en la que la Policía pueda llegar a la sociedad desde otro lugar, corriéndonos del prejuicio de que la Policía sólo está para determinadas cuestiones de seguridad. Los chicos se acercan y juegan con nosotros, nos hacen preguntas y los adultos nos reciben de una manera impresionante. Todos saben que llegamos para ellos y, de inmediato hay una pava que se pone al fuego. Todas nuestras entregas han sido una celebración" cuenta Gisella.
El Espacio funciona a través de dos ejes: uno son las donaciones y el otro es el cuidado del ambiente por medio del reciclado de tapas plásticas y papeles.
A lo largo de este tiempo, el Espacio ha llegado a más de 70 instituciones. A cada lugar se le han acercado entre diez y quince cajas repletas de elementos y a muchos de ellos se ha regresado.
Cada vez que se elige un destino, un mensaje de whatsapp llega a más de 500 personas que, a su vez, lo multiplican. Así se piden los artículos que cada lugar precisa.
La primera campaña organizada desde el Espacio fue la colecta de tapitas plásticas que fueron donadas a la organización Creando Lazos que brinda ayuda a niños con cáncer y a sus familias. Con el tiempo el Espacio conoció a los integrantes de FUNDACORE, una fundación creada por los papás de los chicos internados en el área de cardiología del Hospital de Niños. Este grupo es el que se encarga de la venta del material reciclable y, con el dinero obtenido, compran elementos para mejorar esa área del hospital.
La relación entre ambas organizaciones ha hecho que FUNDACORE done juguetes y libros para que el Espacio pueda destinarlos a los objetivos elegidos.
Las donaciones del Espacio de Responsabilidad Social con Fines Solidarios han llegado a diferentes puntos del país. La última colecta tuvo como destino una escuela de Catamarca gracias a la invitación realizada por el Centro de Ex Combatientes de Islas Malvinas (CECIM) La Plata, organización que se hizo cargo del transporte.
Para Gisella es imposible elegir una de las entregas por ser la más significativa. "En todas sucede algo, en todas hay algo especial".
El trabajo es constante; los tiempos, a veces, no alcanzan. Desde recibir las donaciones, a buscar cajas, a seleccionar y ordenar lo recibido, organizar las entregas y buscar la mejor forma; la logística es importante.
"La tarea se hace a conciencia. El detrás de bambalinas lleva mucho esfuerzo pero es el secreto para llegar a cubrir las necesidades. Los empleados se acercan todo el tiempo a nuestro tablón" cuenta Gisella.
"No hemos tenido imposiciones ni negativas; todo lo contrario: funcionarios y jefes se han puesto a disposición del trabajo y acercaron sus donaciones. Todo lo que hacemos es representativo de nuestra Institución por lo que lo hacemos con orgullo. Cada vez que necesitamos algo, como por ejemplo un móvil, siempre lo hemos tenido" agregó.
"¿Qué me gustaría? Que esto se replicara en todos los ministerios" finalizó.
Crédito de fotos: Comunicación Institucional Policía de la provincia de Buenos Aires.
Responsabilidad Social, Fines Solidarios, juntar más