San Jorge fue un soldado cristiano de Roma, que habría nacido en Capadocia, la actual Israel, aproximadamente en el año 275 después de Cristo. Siguió la carrera militar, e incluso habría estado al servicio del mismísimo emperador Diocleciano, que en un momento determinado exigió que se rindiera culto a los dioses del Imperio, y que personalmente trató de convencerlo de que abandonase su fe en Cristo.

Como San Jorge no renunció a su fe cristiana ante la exigencia del emperador, fue llevado al templo de los ídolos oficiales romanos para ver si los adoraba, pero ante su presencia, varias estatuas de los falsos dioses cayeron al suelo y se despedazaron. Mientras era sometido a la tortura, recordaba los azotes que le dieron a Jesús y por ello decidió no abrir la boca y sufrir en silencio el castigo. Fue torturado y decapitado el 23 de Abril del año 303. Su nombre se agregó a la enorme lista de los mártires de la Iglesia Primitiva, y fue inmediatamente venerado como Santo.

En la iconografía cristiana se lo representa, montado en su caballo, clavando su lanza a un dragón. Esa representación, se origina en una antigua leyenda, según la cual, el Santo, habría dado muerte a una bestia que tenía sometida a la ciudad de Selena, en la actual Libia, y que devoraba gente y nadie se atrevía a enfrentarlo. Él no sólo lo confrontó, sino que además logró vencerlo. Su victoria despertó admiración por los lugareños, quienes lo escucharon con atención cuando el santo les habló de Jesucristo, al punto tal, de que muchos de ellos se convirtieron al cristianismo. La leyenda de San Jorge liberando del yugo del dragón, a una ciudad o a todo un reino, contribuyó también a que fuera declarado patrón en diversos países –Inglaterra, Portugal, Bulgaria, Ucrania, Etiopía, Georgia, y otros. Durante la edad media, San Jorge fue proclamado patrono de varias órdenes de caballería. Y por ese motivo hasta nuestros días, están bajo su patronazgo, por ejemplo, la Caballería del Ejército Argentino, y la Dirección de Caballería de nuestra querida Policía de la Provincia de Buenos Aires.

Este 23 de Abril, imploremos la intercesión de San Jorge, y encomendemos a todos los hombres y mujeres de la Dirección de Caballería, que en los distintos escuadrones asentados en el extenso territorio de la Provincia de Buenos Aires, cumplen con dedicación y responsabilidad, junto a sus inseparables "compañeros", los caballos, su vocación de servicio.

San Jorge: ruega a Dios por ellos.

Pbro. Hernán Remundini Capellán General