Se cumple un nuevo aniversario de la Policía de la provincia de Tucumán, una de las más antiguas del país, motivo por el cual durante esta semana se están realizando actos diversos.
Relata la historia que el origen de la Policía de Tucumán ocurrió en momentos de la fundación de la provincia en 1565 cuando designaron al Alguacil Mayor, encargado de las funciones policiales. Durante años el sistema perduró con esta estructura; luego de la Revolución de Mayo, las guerras de la Independencia y las luchas civiles se lo designó como Intendente de Policía de la ciudad y la campaña.
En 1832 se estableció el primer Reglamento de Policía y en 1842 se produjo el cambio de denominación a Jefe de Policía, al tiempo que comenzaron a dictarse distintos reglamentos que se sucedieron a través de los años.
Con el transcurso del tiempo, en 1877 se creó el Departamento General de Policía; posteriormente, en 1901 el nuevo Reglamento General se convirtió en un verdadero Código de Policía, con un total de mil treinta tres artículos. La conducción estaba a cargo de un funcionario llamado indistintamente Intendente General de Policía o Jefe de Policía.
Cinco años después, en 1906 se construyó el edificio de la repartición y al poco tiempo los integrantes de la Fuerza comenzaron a publicar la "Revista Policial". En 1908 se incorpora a la Policía de Tucumán el sistema dactiloscópico argentino, creado por el prestigioso Juan Vucetich en la Policía de la provincia de Buenos Aires, con el fin de esclarecer las investigaciones policiales a través del análisis de las huellas digitales de los sospechosos criminales.
En 1910 se instaló la primera Escuela de Cadetes promoviendo la formación policial; en 1945 la denominación de Intendente General fue reemplazada definitivamente por la de Jefe de Policía y la del Comisario de Órdenes por la de Subjefe de Policía.
Más tarde, la Jefatura, que funcionaba en Casa de Gobierno, pasó en 1959 a las instalaciones que ocupaba hasta entonces el Hospital de Niños, en la manzana de Av. Sarmiento, Junín, Santa Fe y Salta. Décadas más tarde se la trasladaría nuevamente, al predio de los ex Cuarteles Militares.
1970 fue un año clave puesto que se dictó la Ley N° 3.656 Orgánica de la Policía de Tucumán que –aunque con algunas modificaciones posteriores- sigue siendo el marco legal actual estableciendo la estructura y el accionar de la repartición con la misión principal del mantenimiento del orden público, la seguridad general y la paz social.
Así, queda explicitado en su primer artículo que la Fuerza "tiene funciones de Policía de Seguridad y Judicial y, como tal, las atribuciones que las leyes, decretos y reglamentos establecen para resguardar la vida, los bienes y otros derechos de la población. También actúa como auxiliar permanente de la administración de justicia".